by Tea Kovacevic
http://www.isisamor.be/PURITY/What_Is_Purity.html
La Pureza comienza en el corazón
La pureza es una cualidad de Dios y es nuestro calidad básica cuando estamos alineados con Dios - cuando estamos siendo nuestro Verdadero Yo. La pureza se inicia en el corazón, con la intención de seguir la voluntad de Dios, que es nuestra Voluntad Superior. Al igual que cuando el arcángel Gabriel anunció a la Santísima Virgen que concebiría el futuro Mesías, ella dijo: "Señor, hágase en mí según tu palabra ". La Pureza implica desinterés, amar a nuestros hermanos y hermanas, y la Voluntad de servir a un bien mayor. También implica honestidad - estar dispuesto a ver dónde podemos tener motivos impuros, pensamientos y hechos impuros y luego gradualmente irnos purificando de ellos.
En el momento de volver a Dios y decír: "Dios, he sido/estado impuro, he seguido al ego y a los falsos deseos. Pero ahora estoy de vuelta y estoy dispuest@ a recorrer el camino de la Verdad. Por favor, guíame". Este es el momento del bautismo por el agua - el momento del arrepentimiento por nuestros pecados, de ver todo lo que es impuro en nosotros y de tomar la elección por un curso de acción diferente: yo quiero la Vida, quiero la Pureza, quiero mi verdadero Yo/Ser!
Esta decisión se inicia en el corazón, con un remordimiento sincero por la impureza que hemos vivido hasta ahora, y con la decisión de que no nos vamos a esconder de Dios nunca más. Cualquiera que sea la debilidad y la imperfección, estamos dispuestos a hacerle frente y renunciar a la misma. Tal vez no se hará en un día, tal vez requiera meses o incluso años, pero estamos dispuestos, porque sabemos que no es parte de lo que somos en Dios.
Jesús dijo: " Bienaventurados los limpios de corazón, porque ellos verán a Dios. " (Mateo 5:8). La pureza de corazón no se puede fingir, y Dios no puede ser burlado. Los escribas y los fariseos llegaron para ser bautizados en el río Jordán, pero Juan el Bautista les reprendió, porque él vio lo que había en su corazón, vio su deshonestidad y la simulación. Ellos buscaban parecer puros y justos, pero dentro estaban llenos de oscuridad:
"¡Ay de vosotros, escribas y fariseos, hipócritas! Porque sois semejantes a sepulcros blanqueados, que por fuera parecen hermosos, mas por dentro están llenos de huesos de muertos y de toda clase de inmundicia." (Mateo 23:27)
El orgullo es lo opuesto a la humildad. Uno no puede ser puro si es orgulloso pensando que no necesita a Dios, o cree que sabe más que Dios. Hay puritanos, que practican la pureza externa, pero ¿que hay en sus corazones? ¿Realmente dejan sus vidas en manos de Dios? ¿Se han entregado? ¿Confían en Dios? Así pues muchas personas tratan de controlar a Dios, en lugar de permitir que Dios les guíe.
Hay mucha gente que aceptan ideas impuras acerca de Dios - ilusiones - que creen que son verdad. Incluso los ateos tienen su propia idea acerca de Dios, una idea que les permite prescindir totalmente de Él. Y esto es impureza. Un sistema de creencias que niega a Dios, o ve a Dios como una figura externa, o afirma que somos pecadores por nacimiento y por lo tanto, inherentemente impuros - todas esas creencias son falsas creencias que niegan nuestra verdadera naturaleza. Son impurezas que afectan a las masas (o como algunos la llaman en las enseñanzas esotéricas, la "conciencia de las masas", que es una mente colectiva de todos los pueblos de la tierra) y tenemos la necesidad de ser purificados de ellas..Pero primero, tiene que ser limpiado en nuestras propia mente, de manera que podamos contribuir con los mayores pensamientos puros y plenos.
En el otro extremo del espectro se encuentra la creencia - que se oye en los círculos de la Nueva Era - que no necesitamos ser salvados, porque no importa lo que hacemos, todo está bien y que somos inmortales. En otras palabras, que no es necesario volver a la pureza que abandonamos, como se simboliza en el Jardín del Edén (y en esta vida), pero podemos ser salvados sin tener nada en cuenta. O que después de algún procedimiento exterior o ritual, como el canto, la meditación, el estilo de vida y la dieta - sin renunciar a las impurezas en nuestro corazón - garantizamos nuestra salvación.
Nada va a hacer eso, sino completar la entrega y decir lo que la Madre María, dijo: ". Señor, hágase en mí según tu palabra" O como dijo Jesús en el Huerto de Getsemaní: " Padre, si quieres, aleja este vaso de mí; pero no se haga mi voluntad sino la tuya ". Renuncias incluso a la necesidad de salvar tu vida física - a sabiendas de que tienes la vida eterna en el Espíritu.
El bautismo por el agua
El bautismo por el agua es el momento de nuestro retorno a Dios y su orientación (Dirección Divina), que dejamos en el Jardín del Edén. Es el regreso a casa del hijo pródigo. Y el Padre se complace, le da la bienvenida a casa con los brazos abiertos y celebra su regreso. No se habla de castigo por los pecados pasados! El castigo es el sufrimiento que tiene que soportar, mientras vive la separación del Padre. Cuando regresemos, es cuando comienza nuestra vida real, que es cuando empezamos a Ser. Antes, estábamos vagando en el desierto, siendo golpeados en la escuela de la vida.
Una vez que regresamos y nos arrodillamos ante Dios en el altar de nuestro corazón, se inicia el proceso de purificación. Puede ser que tengamos impurezas en los cuatro cuerpos inferiores - Identidad, mental, emocional y físico, en forma de ideas falsas, falsos pensamientos (egoísta), emociones negativas, deseos y apegos emocionales diversos, así como impurezas o debilidades en nuestro templo físico . Sin embargo, si nuestro corazón es puro - porque sabemos la verdad de lo que Somos en Dios - entonces todas esas impurezas pueden ser poco a poco tratadas. Con Dios, todo es posible.
Cómo dejar de lado las impurezas?
No estamos obligados a ser perfectos antes de enfrentar a Dios. Estamos obligados a tener un corazón puro y la voluntad de renunciar a nuestros apegos. ¿Y cómo lo hacemos? Al amar a Dios Más de lo que amamos a las cosas de este mundo. Cuando decimos " Dios mio si quieres, toma este falso deseo de mí, yo no lo necesito más". O "Aleja de mi estos pensamientos, yo no los necesito", o lo que sea de accesorio o impureza que estamos tratando. Pero dejar ir las impurezas puede ser complicado porque pensamos que las necesitamos. Por ejemplo, creemos que necesitamos el amor de alguien fuera de nosotros mismos (y Dios) como el sueño de una pareja perfecta y creemos que tenemos que utilizar nuestra energía mental y emocional en los discursos y por lo cual mal cualificamos la energía. Más tarde, nos sentimos decepcionados porque la persona nos ha dejado o no está interesada en nosotros, y estamos atrapados en el dolor y la decepción. Primero cuando estamos soñando con el placer - nos hace sentir bien, y luego nos regodeamos en el dolor - que nos hace sentir mal. Pero ambos son mal cualificaciones debido a que ambos se derivan de nuestro apego a algo de este mundo.
Y debido a la adhesión al placer, es difícil renunciar a ella. La única manera es darse cuenta de que es un placer dualista y siempre viene junto con el dolor. Y eso no es de Dios. Y porque amamos a Dios Más, decidimos que no necesitamos más eso y nos entregamos a Dios y le pedimos a Dios que nos lo quite. Si lo pedimos desde el fondo de nuestro corazón - si realmente queremos dejarle ir - va a ocurrir y nuestra adhesión no lo será más.
¿Y qué es la libertad? Nosotros ya no nos quedamos atrapados en los mismos patrones mentales, emocionales y hábitos negativos que tampoco se centran en Dios. Y cuando viene la tentación, podemos decir: "¡ Aléjate de mí, Satanás". Porque sabemos que es una opción falsa, que sólo puede hacernos daño y nos arrastra a un pozo sin fondo. Lamentablemente, algunas personas sólo aprenden de la escuela de la vida, donde siguen sus deseos inferiores y sus apegos hasta que les causan problemas graves en sus vidas, que pueden incluso manifestarse en forma de enfermedad física. En ese momento el "placer" desaparece por completo y sólo queda el dolor, y nos damos cuenta de que realmente no hay ni había ningún beneficio en mantener ese hábito. Pero tal vez nos cueste la salud física, porque después de persistentes mal cualificaciones de la luz de Dios a través de nuestros vehículos mentales, y emocionales, se deteriorará. Las enseñanzas esotéricas dicen que tenemos cuatro cuerpos inferiores, que están a nuestro alrededor, que nos ayudan a expresarnos en el mundo. Ellos ayudan a nuestra identidad más alta que Dios nos da antes de nacer porque tenemos un propósito en la vida, nuestro cuerpo mental nos permite pensar y procesar la información y acceder a la Mente superior de Dios, nuestro cuerpo emocional, que procesa nuestros sentimientos y en su máxima expresión, es nuestro vehículo para expresar el amor. Y luego está nuestro cuerpo físico, que a menudo es muy afectado por los demás órganos y la forma en que pensamos y sentimos. Muy a menudo nos convertimos en físicamente enfermos si albergamos un gran dolor en nuestro cuerpo emocional o pensamientos de enojo en nuestro cuerpo mental. Así, una parte de la limpieza y purificación a nosotros mismos es purificar nuestros pensamientos y sentimientos, y muchas veces a través de ello nuestro cuerpo físico de forma espontánea se cura a sí mismo. Es bien importante mantener nuestro cuerpo libre de químicos y sustancias tóxicas como la nicotina la cafeína, el azúcar, el alcohol, el tabaco y el chocolate. El chocolate contiene teobromina, que es tóxico para los perros y los puede matar. Si nos tomáramos la misma cantidad en proporción a nuestro tamaño, también podríamos ser envenenados.
La impureza es la mal cualificación de la Luz de la Madre
¿Qué es la pureza? En un sentido físico, la pureza es la condición o cualidad de ser pura, libre de todo lo que degrada o contamina. En un sentido emocional y mental, la pureza es la libertad de la culpa, la vergüenza y las malas tendencias. En un sentido espiritual, la pureza utiliza la Luz Espiritual (se llama en las enseñanzas esotéricas la Luz de la "Madre" a todo el plano físico y se dice que es la Madre, mientras que el Padre se dice que es toda del Espíritu), de conformidad con la Voluntad de Dios , es decir, no para fines egoístas, sino para elevar el Todo. Todos los hábitos negativos y las adicciones están en realidad utilizando la Luz de la Madre para la gratificación del yo inferior - el "carnal" o mente inferior humana y el ego. Incluso si sólo se trata de pensar en algún evento pasado, donde sentimos que alguien nos ha herido, podemos mal cualificar la luz al reproducir en nuestra mente lo que dijo y por qué, y cada vez sentirnos más enojados o heridos, entrando en una espiral descendente.
Del mismo modo, podemos mal cualificar la energía cuando nos imaginamos un futuro con resultado negativo, por ejemplo, lo que nos podría suceder a nosotros o a nuestros seres queridos en algunas situaciones específicas. El miedo a lo desconocido y el miedo a la pérdida, es lo que provoca esos pensamientos y sentimientos, que pueden ser muy agotadores. Y la base y la causa del miedo suele ser la falta de fe en una fuente divina de orientación y amor. Y también es una mal cualificación de la energía. Incluso es magia negra porque proyectamos pensamientos negativos en el universo, como si invitáramos a los problemas, en lugar de confiar en que Dios está en control y que todo estará bien. Este tipo de magia se activa incluso si nunca han elegido conscientemente entretenerse en ningún tipo de magia. Cuando queremos a alguien que ha muerto o ha enfermado o tiene algún tipo de desgracia o destrucción, deseamos por nosotros mismos el beneficio personal de que mejore, sin importar las consecuencias perjudiciales para los demás, todo esto es creado a partir de un mal uso de nuestra voluntad, no está en alineación con la más alto bien para todos o incluso con la Voluntad de Dios.
La condena, la crítica y el juicio son también una forma de magia negra, porque estamos pensando en la gente, con el chisme, con la disección de sus vidas y acciones, a menudo proyectamos nuestras propias impurezas hacia ellos. Se trata de una mala intención, porque no está destinado a ayudarlos, sino sólo a la gratificación de nuestro propio ego. De hecho, para muchas personas es una forma de escapar de mirar la viga en el propio ojo y hacer frente a sus propios problemas. Es más fácil centrarse en otras personas, ya que deja intacto nuestro ego.
De hecho, hay muchas formas de impurezas que pueden ser agrupados de acuerdo a las líneas del reloj cósmico. El reloj cósmico es una representación circular de doce grandes cualidades de Dios, es decir, los aspectos de la conciencia de Dios.
Estas son las perversiones de las doce cualidades de Dios, que son: (12) Poder de Dios, (1) Amor de Dios, (2) Maestría de Dios , (3) Control de Dios , (4)Obediencia a Dios, (5 ) Sabiduría de Dios, (6) Armonía de Dios, (7) Gratitud a Dios, (8) Justicia de Dios, (9) La Realidad de Dios, (10) Visión de Dios y (11) Victoria de Dios.
La Luz de la Madre puede ser mal calificada en cada uno de esos rayos, es decir, cada cualidad de Dios puede ser pervertida por el ego y la mente carnal. Y esto, entonces es la impureza. El camino del Ser es el camino de la pureza - de regresar a nuestra pureza original y a cualidades originales de que fuimos dotados. Eso requiere enfrentarnos a nosotros mismos y reconocer la viga en nuestro propio ojo y luego trabajar para entregarla. Sin embargo, esto también significa que si no tenemos una viga en particular - si somos puros en un rayo en particular - se puede ver la viga en otras personas y hacer que la otra persona lo vea para crecer. No tienes que ser puro en todos los doce rayos antes de que notes impurezas en otras personas.
El enfoque que muchos buscadores espirituales aplican hoy en día es que no se puede discernir si algo es correcto o no en Dios, porque no eres puro en ti mismo. Y por lo tanto no debes decirle a la gente qué hacer, no debes hablar con tu verdad, ya que es sólo tu opinión personal y no una verdad última. Cuando la realidad es que se puede discernir si ciertas cosas son correctas o no en Dios, incluso si no estamos completamente libres del ego en todas las áreas. Aunque todavía no estamos como Jesucristo. Basta con echar un ejemplo a un asesino en serie o un violador - la mayoría de la gente estaría de acuerdo en que lo que hacen está en contra de la ley de Dios- y sin embargo uno no tiene que ser un santo para llegar a esta conclusión.
Nuestro discernimiento Cristico mejorará a medida que nos purificamos y vamos a ser capaces de discernir incluso las mentiras sutiles en las que algunas personas son muy hábiles en propagar sin ser reconocidos. Las mentiras más sutiles son presentados por los falsos maestros y falsos representantes de Dios, que Jesús llamó los lobos con piel de cordero. Pueden decir todas las palabras correctas y hacer todas las cosas correctas, pero su corazón no es puro - porque no se han entregado a Dios. En su orgullo, creen que son más que Dios.
Falsa pureza de los falsos maestros
Del orgullo espiritual se derivan las mentiras más sutiles, más difíciles de reconocer. ¿Y por qué? Porque el orgullo espiritual está siempre cubierto con falsa pureza. Esas personas parecen puras y santas, pero a menudo son "más santos que tú" - son hipócritas. Pueden profesar que te aman y quieren lo mejor para ti, pero en realidad te socavan y socavan tu relación con Dios. Ellos te dirán - a menudo en un lenguaje enrevesado - que no eres lo suficientemente bueno, o lo suficientemente puro para conocer a Dios en tu corazón y que ellos te mostrarán el camino. Son los falsos maestros, los pastores falsos, los iniciadores falsos, autoproclamados maestros de la humanidad, cuyo objetivo es destruir al Cristo en medio de ellos, al igual que crucificaron a Jesús hace 2000 años.
Los escribas y fariseos pretendían ser puros y sin embargo, tanto Jesús como Juan el Bautista les reprendieron. En esta época debemos reconocerlas y reprenderlos igual. Y para eso, tenemos que ser puros de corazón, tenemos que estar dispuestos a entregarnos completamente a la Voluntad de Dios, porque sólo entonces podremos reconocerlos. Tenemos que ser sencillos como palomas y prudentes como serpientes - sabios como ellos mismos - para ver a través de sus mentiras y reprenderles.
La falsa pureza es un fenómeno generalizado hoy en día en los movimientos espirituales. Se habla del amor incondicional, la bondad y la buena voluntad hacia todos los hombres, pero cuando se trata de los orgullosos, eso no puede ser puro, no puede ser de Dios. En esta Era de la llamada democracia, nuestro derecho básico de hablar la Verdad de Cristo es alejado de nosotros. Estamos obligados a ser "políticamente correctos" y promover la igualdad y la diversidad, es decir, la aceptación incondicional de todo, incluso lo que no es de Dios. Cuando tratas de expresar tu verdad, incluso puedes ser demandado.
Esto es lo que hace la falsa pureza, esto es lo que le hace el amor incondicional al Cristo: se ahoga y lo mata. Se te condena por decir la Verdad de Dios que sabes en tu corazón. Eres silenciad@ por ser la voz en el desierto. Pero a pesar de la resistencia, seremos la Verdad y seremos esa voz - porque para esto estamos aquí.
Entrega: Amar a Dios Mas que a todo
Una vez volvemos a Dios y empezamos a caminar con Él, nos volvemos a Él cada vez que nos enfrentamos a un desafío. Cada vez que sentimos que hay un apego o impureza, vamos a orar y pedimos que se nos quite. Cada uno de nosotros tiene un problema que es el principal obstáculo que nos impide ser el Cristo. Para algunos será el miedo a lo desconocido, para algunos la auto-condenación, para algunos la necesidad de ser aceptado por otros. Esta podría muy bien ser la razón original de nuestra caída, a lo que nos enfrentamos una y otra vez en múltiples vidas. Y ahora es el momento de tratar con ello - para decidir amar a Dios Más y simplemente dejarlo ir y elegir a Dios.
Entrégate, decide y siente en tu Ser que no lo necesitas - que era solo una cosa externa que antes buscabas - porque sabes que tienes todo en Dios. Salta al río y nada! Y Dios y sus ángeles te llevarán.
Al entregarte, hay paz. Y tu motivación cambia - eres guiado a que tus deseos crezcan, los deseos de tu Ser verdadero, en oposición a los deseos del ego. Y entonces sabrás qué hacer y si algo es bueno para ti o no. Simplemente lo sabes en tu corazón y habrá paz sobre ello, porque pase lo que pase, no te pueden sacudir de tu Ser -, ya que estás anclado en Dios. Cuando se entregan todos los apegos a un determinado resultado y aún así algo dentro te está diciendo que lo hagas, entonces Dios es quien probablemente te dice que lo hagas. Y entonces, es lo que hay que hacer.
Así que con la Pureza nace la Paz y la Libertad. Un conocimiento más profundo de que las cosas estarán bien. Y la libertad de seguir el impulso del corazón, la pequeña voz que no se puede escuchar hasta que hayamos eliminado la voz del ego. Pero una vez que lo hacemos, podemos realmente escuchar. Y lo sabremos, porque no habrá más una separación entre nosotros y Dios. Yo y el Padre somos uno, y por lo tanto, mi voluntad es la Voluntad de Dios.
Bautismo de fuego
Mientras caminamos con Dios, entregándonos cada vez más, nuestros cuatro cuerpos inferiores se convertirán en puros cada vez más. Y vamos a llegar a un punto en que somos totalmente transparentes, de modo que cuando el príncipe de este mundo venga, no tendrá nada que ver con nosotros.
Y entonces estamos listos para el bautismo de fuego, también llamada la Prueba de fuego, cuando podemos ser lavados por el fuego del Espíritu Santo sin ser consumidos por él. Debido a que el fuego del Espíritu Santo, consume todas las impurezas, todo lo que es irreal (no de Dios) en nosotros. Si no hay nada de irreal en nosotros, nos convertimos en lo que somos arriba aquí abajo - El Espíritu y la Materia en la acción, la unión de Dios Padre-Madre a través de nosotros, el Hijo Cristico. Y esta es la meta de la vida: ser el Cristo en la Tierra, para ser la unión del Padre y la Madre, Alfa y Omega, el Espíritu y la Materia.
Eso sólo se puede lograr caminando por el sendero de la Pureza y siguiendo la Dirección Divina. Así es como Dios prevé el proceso de crecimiento de sus hijos: que comienzan como niños en Cristo - inocentes y puros de corazón y luego a través de expresar su verdadero Ser y multiplicando sus talentos dados por Dios para Ser Más, y por eso, crecen en la conciencia y la comprensión de la vida. Sin embargo, habían dejado ese camino - esa forma de Ser - atraídos por la Serpiente, un falso maestro que les ofreció el falso más de Dios, por lo que perdieron su camino y su relación con Dios. Ellos no confiaron en que Dios realmente quería proveerles de todo, si se adherían a su guía y a la orientación de los Maestros designados por Dios.
La conexión únicamente puede ser re-establecida a través de la Pureza. Tenemos que amar a Dios Más que a cualquier otra cosa, incluso nuestra vida física. Por eso Jesús dijo que el mayor mandamiento de la ley es amar a Dios con todo nuestro corazón, alma y mente. Porque eso significa que nos esforzamos por alcanzar la pureza en nuestros cuatro cuerpos inferiores (nuestra alma y mente) y vivimos para Dios solamente. Cuando vivimos para Dios, Somos nuestro verdadero Ser y es el cumplimiento de nuestra razón de Ser. También estamos trayendo la luz de Dios en la octava material y elevamos el Todo. Y así por el Ser, estamos completando la figura del flujo del ocho (8) vertical y horizontal: el flujo de la luz y el amor entre nosotros y Dios y entre nosotros y otras personas. Por lo tanto, estamos siendo el Cristo en la Tierra.
